Vivir bajo ciertas reglas no es agradable para algunos, pero son indispensables para mantener un orden en esta sociedad que de por si vamos de mal en peor, entonces sin leyes y reglamentos podríamos imaginarnos un escenario apolítico o algo así como Gotham City, hogar de un personaje de cómic muy conocido. Aunque pareciera que me estoy yendo a los extremos no es un escenario que podamos descartar o incluso que ya exista.

Vivimos en un mundo de reglas, desde las establecidas en tu casa, en la calle, en tu trabajo, en establecimientos, tiendas, incluso creo que entre animales. Pero nos enfocaremos en el ambiente laboral, lugar donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo dependiendo de las jornadas de trabajo de cada empresa y por tal motivo son necesarias para mantener ese orden y muchos deseamos aunque a otros les dé igual. De esta manera les daré 4 consejos para establecer reglas:

Ubicar zonas vulnerables.

Desde un inicio habrás establecidos puntos importantes a seguir, dependiendo del giro de la empresa habrás impuesto desde la puntualidad hasta reglas de seguridad. Pero si cuentas con áreas de comida y descanso puedes aplicar ciertas normas que permitan mantener limpio el lugar, entre otras áreas. Si detectas irregularidades es momento de planear una guía o reglamento que ponga todo en orden.

Crear sus propias reglas.

Los compañeros de trabajo pueden realizar aportes, sugerencias o ideas para el reglamento. Normalmente el patrón o gerente es quien decide cómo serán las reglas y en ocasiones suele haber inconformidad pero si se pide la opinión de los demás, al final los empleados terminaran estableciendo sus propias reglas, claro está, que debe ser igual para todos sin ventajas para algunos, ya que se evaluara por los jefes.

Reglas simples pero efectivas.

No siempre es necesario realizar algo tan estricto y laborioso, simplemente con decir esto se puede y esto no bajo un buen argumento será más fácil seguirlas. Por ejemplo, en tu zona de trabajo no se permitirá alimentos y bebidas debido a que puede derramar sobre sobre papeles importantes y equipo de cómputo. Otro ejemplo puede ser llegar tarde sin justificación o no solicitar permiso será acreedor a un retardo o falta. Reglas simples pero efectivas.

Afrontar las consecuencias.

No basta con establecer normas pues los trabajadores están propensos a no seguirlas, ya sea por rebelión o por descuido pero es importante comunicar los que sucede si no cumples con lo ya dicho. No se trata de establecer miedo, simplemente comprender las consecuencias de sus actos y posteriormente un aprendizaje para que no suceda de nuevo. Para los que llevan más tiempo en el lugar puede ser un poco difícil cuando se trata de nuevas reglas pero quienes son de nuevo ingreso serán más sencillo que las cumpla.

Comprender lo indispensable que es cumplir con ciertas normas para un buen ambiente es importante, aunque a veces te desesperes que otros no cumplan con ello y sientas que no les importa. Tampoco se trata de ser muy estrictos y apegados al reglamento pues sería un ambiente tenso y con temor al error y un día puede llegar el momento que incluso no será necesario estar recordando pues cada quien sabrá lo que debe hacer y lo que no.